Jesús le llamó cuando tenía unos 17 años, estando remendando las redes para ir a pescar en el mar de Galilea.
Fue el discípulo más amado de Jesús.
Durante la Última Cena recostó su cabeza en el pecho del Señor.
Juan nos cuenta cómo Jesús lavó los pies a los Apóstoles en la Última Cena y les dio el Mandamiento del Amor.
Fue el único de los Apóstoles que acompañó a Jesús durante su muerte en la Cruz. Allí estuvo junto a la Virgen María.
Es el autor del cuarto Evangelio, de tres epístolas y del libro del Apocalipsis.
Vivió muchos años.
Al final repetía una y otra vez: Jesús nos dijo:
“Amaos los unos a los otros como Yo os he amado.”
En este enlace, puedes descargarte la presentación de la vida de san Juan Evangelista, con un pequeño juego familiar.